En 1986, una coyuntura desafortunada vuelve a reunir al coro con el maestro Mario Baeza. Luz María, la madre, enferma gravemente. Los hijos se agrupan y aúnan esfuerzos por su salud. Invitan a los amigos de la familia para asistir a una misa de rogativas, la cual culmina con un hermoso concierto.
En 1987, el maestro Mario Baeza incorpora un repertorio renovado e integra al coro a los niños de la tercera generación. Con esta nueva formación, el coro ofrece un ciclo de conciertos durante los meses de Octubre y Noviembre de ese año. Se destacan especialmente los conciertos ofrecidos en el “Teatro Municipal” de Santiago de Chile, en el “Goethe Institut” y en el auditórium de la “Escuela Moderna de Música”, concierto este último realizado en homenaje al maestro Mario Baeza con ocasión de su cuadragésimo quinto aniversario como Director de Coros.
El desarrollo y crecimiento natural de los hijos, con las consiguientes nuevas responsabilidades y compromisos en la formación de sus propias familias, hizo que durante algunos años el coro abandonara sus presentaciones públicas. Sin embargo, siempre estaba latente en todos la añoranza por los conciertos y, en diferentes momentos y circunstancias, el coro vuelve a reunirse. En este “recomenzar”, se incorporan primeramente nueras y yernos y, luego, hacen su aparición los niños de la tercera generación.
En 1977, bajo la dirección del maestro Mario Baeza y con ocasión de las celebraciones de Semana Santa, se realiza un concierto en la “Iglesia Luterana de Lota” (Santiago de Chile), y Televisión Nacional de Chile difunde una serie de conciertos especiales para todo el país.
En 1979, el maestro Mario Baeza organiza para el coro una segunda visita a
La afición de cantar en familia había nacido quince años antes, cuando el mayor de los hijos, Manuel José, estuvo en condiciones de repetir los primeros cantos que le había enseñado su madre. A medida que el resto de los hijos fue aumentando la familia, estos se incorporaron, por imitación, al coro de sus hermanos mayores sin que existiera otra intención que hacer más grata la convivencia familiar.
UN NUEVO CORO
En 1969, el mayor de los hijos tuvo ocasión de viajar a los Estados Unidos de Norteamérica como integrante del “Coro de
Gracias al talento y musicalidad de los niños fue posible avanzar rápidamente en la preparación de un repertorio; y en ese mismo año el coro pudo ya realizar sus primeros conciertos públicos. Entre 1969 y 1970, el coro emprendió una extensa gira nacional realizando conciertos en las principales ciudades de Chile, culminando esta con un concierto considerado consagratorio en el “Salón Filarmónico del Teatro Municipal” de Santiago de Chile.
PRIMERA GIRA INTERNACIONAL
En el mes de Abril de 1971, el Coro de
