En 1986, una coyuntura desafortunada vuelve a reunir al coro con el maestro Mario Baeza. Luz María, la madre, enferma gravemente. Los hijos se agrupan y aúnan esfuerzos por su salud. Invitan a los amigos de la familia para asistir a una misa de rogativas, la cual culmina con un hermoso concierto.
En 1987, el maestro Mario Baeza incorpora un repertorio renovado e integra al coro a los niños de la tercera generación. Con esta nueva formación, el coro ofrece un ciclo de conciertos durante los meses de Octubre y Noviembre de ese año. Se destacan especialmente los conciertos ofrecidos en el “Teatro Municipal” de Santiago de Chile, en el “Goethe Institut” y en el auditórium de la “Escuela Moderna de Música”, concierto este último realizado en homenaje al maestro Mario Baeza con ocasión de su cuadragésimo quinto aniversario como Director de Coros.
